LA CALLE ESTÁ HABLANDO...........

Esta mañana, varias personas de distintos perfiles sociales, con las que he hablado, todas han coincidido en afirmar lo mismo: PRESUNTAMENTE, LOS MIEMBROS DEL JURADO QUE HAN JUZGADO AL EX MONOLT HONORABLE, Sr. Camps, en el caso de los trajes, FUERON COMPRADOS con dinero efectivo al poco de empezar el juicio.

La opinión está basada, y todos coinciden, a pesar de no conocerse entre sí, en que la actitud del Sr. Camps durante el desarrollo de las sesiones en la Sala del Tribunal, fue de prepotente, apreciándole una cierta mirada sarcástica, socarrona, engreída, y presentado una tranquilidad y una seguridad del posible resultado, totalmente fuera de lo común. No olvidemos que en muchas ocasiones tuvo que ser llamado al orden por el propio Magistrado, Presidente de la Sala.

Más aún.....En los últimos días el Sr. Camps mostró descaradamente y de forma estratégica a las cámaras allí presentes, la portada del libro de Job. Dando descaradamente a entender que su final podría compararse con el que tuvo el personaje biblico de Job.

Y, sin ser psicólogos especializados, llama la atención la forma de entrar al Palacio de Justicia en la tarde-noche en el que iba a pronunciarse el veredicto. El Sr. Camps entró animado, con andares muy seguros, con cierto pavoneo de su persona, sonriente......y sucedió algo significativo: un señor de avanzada edad muy bien vestido, tal cual requería el Acto, en la entrada lo abraza efusivamente, y se detenemos la imagen, da la sensación que le está dando un abrazo de enhorabuena, de satisfacción.....y en la expresión de la cara, ambos dos dan a entender complicidad, alegría y sorna hacia quiénes están esperando un veredicto condenatorio.

LA CALLE, LA SOCIEDAD CIVIL VALENCIANA, lo tenemos ya calificado. Sr. Camps, ex molt honorable: NOS HA ENGAÑADO.  Nuestra Comunidad está en quiebra técnica. Y usted y los miembros del Partido Popular nos lo tenían a todos, completamente ocultado. Y cuando digo a todos, digo bien, porque estoy seguro que en Sede Central en Madrid de su propio Partido, el Sr. Rajoy y su equipo de confianza también lo desconocían.

Ahora vamos entendiendo porqué el Sr. Rajoy no ha nombrado ministro de nada al Sr. González Pons, cuando todos, medios de comunicación incluídos a nivel nacional, esperábamos que el futuro ministro Portavoz del Gobierno hubiese sido el Sr. González Pons.

El feudo valenciano ha puesto en peligro la supervivencia del dominio absoluto del Partido Popular en la Comunidad Valenciana. La suerte para ellos, es que, hasta ahora, el PSOE no tiene ningún líder con categoría personal para iniciar una oposición seria y firme para ir trabajándose el futuro triunfo que les puede esperar, porque el Sr. Camps se ha cargado la confianza.

Ahora entendemos también, porqué el Sr. Fabra, actualmente Presidente de la Generalitat, fue impuesto por D. Mariano Rajoy, frente a la frontal oposición de los jefazos valencianos, incluída la reina del Reino, Doña Rita Barberá.

Valencia ha prosperado en estos últimos años gracias a su Alcaldesa, Rita Barberá, por supuesto. Pero, posiblemente, una de las mejores alcaldesas que puede tener o quisiera tener cualquier ciudad del mundo, ha cometido un error: confiar y supervalorar a su delfín, el Sr. Camps.

Posiblemente su deseo de control le oscureció el panorama y no la dejó ver lo que estaba haciendo mal: LA GESTIÓN ECONÓMICA DEL MOLT HONORABLE.

A veces cosas tan simples, aparentemente imposibles, la ceguera de la inteligencia las convierte en posibles. Y eso es lo que ha debido suceder.

De la honradez personal de Camps nadie duda, de la de Costa todo el mundo. Y de su mala gestión, por supuesto, nadie duda. Lo ha hecho mal, rematadamente mal....quizás su perfil, el que ha demostrado durante el juicio de engreído, prepotente, lo que vulgarmente se llama en Valencia, guapito de cara y chico dandy.....eso es lo que lo ha convertido así mismo en lo que ahora, LA CALLE, lo denomina CADÁVER POLÍTICO.

El Sr. Camps ha confiado con presuntos sinverguenzas, chulos y mal educados señoritos, entre ellos, por supuesto, el Sr. Costa. Y ahora, tras el juicio, sinceramente, no les da verguenza seguir cobrando sueldos con dinero público de todos los valencianos ?.......................

Y Doña Rita con tal, desde su despacho, de tener controlado el Ayuntamiento, el Partido y la Generalitat, no ha podido percatarse de que las arcas de la Generalitat iban directas a la quiebra. Era su delfín........era y ha sido su delfín.................Esperemos que su propio delfín no le provoque su fín.

Valencia espera todavía mucho de su Alcaldesa. Y como todos somos humanos y nos podemos equivocar, los valencianos van a comprender el error cometido por ella. Aunque ciertamente, a partir de ahora no debe, ni por asomo, aparecer algo que oscurezca el panorama.